La tranquilidad de Cajamarca se ha visto sacudida por un creciente malestar debido al presunto incremento excesivo en las tarifas del gas natural, y la situación se agravó aún más cuando la empresa Alcanos, responsable del servicio, no se presentó a un debate clave convocado por el Concejo Municipal.
El debate, previsto para discutir y esclarecer los motivos detrás de las altas facturas que están recibiendo los usuarios, dejó a la comunidad sin las respuestas que tanto esperaban. Según el concejal Stiven Báez, quien lideró la convocatoria, la empresa no ofreció ninguna justificación para su ausencia: “La convocatoria se hizo el pasado 2 de agosto, y la empresa no emitió ninguna respuesta. Estamos preocupados porque no tienen ninguna oficina de atención al usuario en la localidad; hay facturas que han incrementado hasta tres veces el valor”.
El aumento en las tarifas ha generado una ola de indignación entre los residentes de Cajamarca, quienes se han visto sorprendidos por los altos costos en sus recibos, sin una explicación clara de la empresa. Ante esta situación, el concejal Báez anunció que se elevará una queja formal ante la Superintendencia de Servicios Públicos, con la esperanza de que se tomen medidas correctivas y se protejan los derechos de los consumidores.
La comunidad cajamarcuna esperaba respuestas en el debate, pero la inasistencia de Alcanos solo aumentó la incertidumbre y el malestar generalizado. “Nos tomó por sorpresa, nunca una empresa se había negado a asistir. De hecho, teníamos el recinto lleno porque hay un malestar general con los cobros; estuvimos esperando que se pronunciaran, pero ni siquiera dieron una excusa”, lamentó Báez.
Ante la falta de comunicación por parte de la empresa, el Concejo Municipal de Cajamarca ha decidido escalar la situación a la Superintendencia de Servicios Públicos, confiando en que la intervención de esta entidad ayude a esclarecer los motivos de los aumentos y garantice un servicio justo para todos los usuarios.
Intentaron contactar a Alcanos para obtener su versión de los hechos y conocer su postura frente a las acusaciones y la ausencia en el debate, pero la empresa optó por no emitir ningún comentario, lo que ha intensificado el malestar entre los habitantes. Mientras tanto, los ciudadanos de Cajamarca se mantienen en estado de alerta, a la espera de una respuesta que les permita comprender la situación y, sobre todo, que alivie el impacto económico que los incrementos en las tarifas están generando en sus hogares.