El DANE presentó su informe mensual sobre el desempleo en Colombia, destacando una leve mejora en Ibagué. Según el reporte, la tasa de desempleo en la capital tolimense disminuyó a 14,7% durante el trimestre marzo – mayo de 2024, una reducción de 3,1 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo de 2023, cuando fue del 17,7%.
Asimismo, la tasa de desempleo en Ibagué también bajó en comparación con el trimestre anterior de este año, cuando se situaba en 15,2%. Esta reducción de 0,5 puntos porcentuales refleja un avance en el mercado laboral local. Sin embargo, Ibagué sigue siendo la cuarta ciudad con la tasa de desempleo más alta del país, solo superada por Quibdó (28,6%), Riohacha (19,5%) y Florencia (16,4%).
A pesar de la disminución en la tasa de desempleo, la informalidad laboral en Ibagué ha aumentado significativamente. Durante el mismo periodo, la informalidad alcanzó el 48,7%, un incremento de casi 2 puntos porcentuales en comparación con el mismo trimestre del año anterior, cuando se registró un 47,2%.
El informe también señala una mejora en el desempleo juvenil, que pasó del 25,8% en el trimestre marzo – mayo de 2023 al 22,7% en el mismo periodo de 2024. Esta disminución de 3,1 puntos porcentuales indica un avance en la integración laboral de los jóvenes en la ciudad, aunque el desempleo juvenil sigue siendo un reto importante.
A nivel nacional, el DANE reportó que la tasa de desempleo en Colombia para el mes de mayo fue del 10,3%, una leve corrección de 0,2 puntos porcentuales en comparación con el mismo mes del año anterior, cuando se ubicaba en 10,5%. Esta tendencia positiva acerca al país a una tasa de desempleo de un solo dígito, algo que no se observa desde noviembre de 2023.
Actualmente, en Colombia hay 23 millones de personas ocupadas y 2,64 millones desempleadas. Sin embargo, la informalidad laboral sigue siendo un problema significativo a nivel nacional, con una tasa del 55,9%, lo que indica que 56 de cada 100 trabajadores se encuentran en condiciones informales.
La situación en Ibagué refleja un panorama mixto: mientras que las cifras de desempleo muestran una mejora, la creciente informalidad laboral subraya la necesidad de implementar políticas que promuevan empleos formales y estables para la población.