Un presunto ajuste de cuentas entre delincuentes en el barrio Jardín Atolsure dejó heridas a dos menores. La Alcaldía de Ibagué condenó los hechos, exigió celeridad en las investigaciones y activó protocolos de atención médica y psicosocial.
Un nuevo hecho de violencia conmocionó a la ciudad de Ibagué este lunes, luego de que dos niñas resultaran gravemente heridas en medio de un tiroteo ocurrido en el barrio Jardín Atolsure, al parecer como resultado de un ajuste de cuentas entre grupos delincuenciales.
La alcaldesa Johana Aranda, a través de sus redes sociales, rechazó con contundencia el suceso y exigió a la Policía Metropolitana y al CTI priorizar la investigación para dar con los responsables. “Ninguna excusa, conflicto o acto criminal justifica que las balas toquen la vida de los más pequeños”, manifestó.
Las menores, identificadas por sus iniciales como S.C.P., de 10 años, y S.M.C., de 13, fueron ingresadas inicialmente a la Clínica Nuestra con heridas por arma de fuego en el abdomen y la zona lumbar, según confirmó la Secretaría de Salud Municipal.
Liliana Ospina, titular de esta dependencia, informó que ambas niñas fueron estabilizadas y trasladadas a otras IPS para manejo especializado e integral. Una de ellas presentaba un estado de conciencia alterado y posible daño abdominal por el alojamiento de un proyectil.
“Desde la Secretaría se realizará el acompañamiento constante para asegurar atención médica de calidad y un proceso psicosocial para las familias”, agregó Ospina. El estado de salud de las pacientes es reservado y continúa bajo estricta observación médica.
La Alcaldía de Ibagué también anunció que brindará acompañamiento jurídico y psicológico a las familias afectadas, reiterando su compromiso con la infancia y con la erradicación de la violencia en los barrios más vulnerables.
Habitantes del sector denunciaron el incremento de hechos delictivos en la zona, y pidieron mayor presencia de la Fuerza Pública y estrategias de prevención comunitaria. “Estamos cansados de vivir entre balas. Hoy fueron ellas, mañana puede ser cualquiera”, expresó un residente.
Desde el Concejo Municipal también se elevó un llamado urgente al Gobierno Nacional para fortalecer los programas de seguridad y protección infantil, especialmente en zonas de alto riesgo.
La alcaldesa Aranda concluyó con un mensaje de solidaridad: “No podemos permitir que la violencia arrebate la paz de nuestros barrios ni la esperanza de nuestras familias. Acompañamos a las víctimas y no descansaremos hasta que se haga justicia”.