La emblemática Normal Superior de Ibagué se preparaba para recibir a sus alumnos de educación primaria en la recién inaugurada Anexa. Sin embargo, el entusiasmo se vio empañado por los problemas que aún aquejan la infraestructura. La personera de la institución, Daniela Plazas, expresó su preocupación por la falta de luz adecuada en los salones, lo que dificulta el normal desarrollo de las clases.
La situación se agrava con la ausencia de servicio de agua en los baños, un aspecto fundamental para garantizar la higiene y el bienestar de los estudiantes y docentes. La comunidad educativa se siente desamparada por las demoras y deficiencias en las dotaciones del Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa (FFIE) y la alcaldía, que han dejado los colegios en condiciones deplorables.
Mientras tanto, en la Normal Superior, la comunidad educativa exige soluciones inmediatas. La situación de las aulas sin luz adecuada y sin agua en los baños es inaceptable para una institución de esta importancia. Los estudiantes merecen un ambiente educativo óptimo para su desarrollo académico y personal, y es responsabilidad de las autoridades brindarles las condiciones necesarias.
Las autoridades deben tomar cartas en el asunto y acelerar las gestiones para resolver los problemas de infraestructura en la Anexa. La educación es un derecho fundamental, y los estudiantes de la Normal Superior merecen recibir una educación de calidad en un entorno adecuado. La calamidad educativa en Ibagué no puede seguir siendo ignorada, y es necesario que se destinen los recursos y esfuerzos necesarios para mejorar las condiciones de los colegios en la ciudad.
La comunidad educativa, así como la sociedad en general, exigen respuestas y acciones concretas por parte del FFIE y la alcaldía para poner fin a esta calamidad. Los estudiantes merecen un futuro prometedor y la educación es el camino para alcanzarlo.
Es hora de que las autoridades se comprometan verdaderamente con la educación en Ibagué y garanticen un ambiente propicio para el aprendizaje y el desarrollo integral de los jóvenes ibaguereños.