En un esfuerzo por mejorar las condiciones de las instituciones educativas rurales de Ibagué, la Alcaldía, a través de la iniciativa “¡Qué padre es mi compadre!”, logró unir al sector empresarial, universidades y el gobierno local para apadrinar 115 escuelas del sector rural. Este programa busca beneficiar a cerca de 12 mil estudiantes al mejorar las instalaciones de estos centros educativos, muchos de los cuales presentan serias deficiencias estructurales.
La alcaldesa Johana Aranda destacó la importancia de esta colaboración durante el evento de subasta en el que los empresarios apadrinaron las instituciones. “Gracias a todos los empresarios, universidades y concejales que se sumaron para cambiar la ruralidad y, con ello, el futuro de nuestros niños, niñas y jóvenes en las montañas de Ibagué”, expresó Aranda.
El proceso comenzó con un diagnóstico detallado presentado por la Secretaría de Educación de Ibagué, que mostró las necesidades específicas de cada institución. Los empresarios pudieron ver las condiciones actuales de las escuelas, incluidos testimonios de los alumnos, lo que motivó a muchos a comprometerse en la causa. Las principales necesidades identificadas incluyen reparaciones en techos, instalaciones hidrosanitarias, y la provisión de materiales como pupitres, pintura y cemento.
María Isabel Peña, secretaria de Educación de Ibagué, explicó la urgencia de estos arreglos. “Hay instituciones que requieren desde arreglos en filtraciones hasta mejoras en los acabados. Cualquier contribución, grande o pequeña, será bien recibida y hará felices a nuestros estudiantes en las zonas rurales”, señaló Peña.
El sector empresarial respondió con entusiasmo. Karina Aguilera, una de las empresarias que apadrinó una de las instituciones, comentó que su objetivo es garantizar que los niños tengan un ambiente escolar seguro y agradable. Carlos Hernando Enciso, presidente de la Cámara de Comercio de Ibagué, anunció que se espera hacer una colecta adicional para cubrir más necesidades de las escuelas rurales.
La mano de obra para estos proyectos será proporcionada por la Policía Nacional y el Ejército, que se sumarán a la iniciativa aportando el trabajo necesario para ejecutar las mejoras en las escuelas. La colaboración entre el sector privado, el gobierno y las fuerzas públicas promete transformar las condiciones educativas en el sector rural de Ibagué.