Una maleta sospechosa generó pánico en la mañana del sábado en la avenida Guabinal. Tras la intervención de la unidad antiexplosivos, se descartó cualquier amenaza. El propietario apareció horas después y explicó que olvidó el equipaje mientras asistía a un velorio.
Un operativo de seguridad se desplegó este sábado en la avenida Guabinal de Ibagué, entre las calles 37 y 44, tras el hallazgo de una maleta abandonada frente a una floristería. El hecho generó alerta entre los transeúntes y comerciantes del sector, lo que motivó el cierre preventivo de la vía por parte de las autoridades.
La Policía Metropolitana activó de inmediato el protocolo de verificación, enviando al lugar unidades antiexplosivos, patrullas motorizadas y un canino especializado en detección de artefactos. La zona fue acordonada mientras se realizaban las inspecciones correspondientes.
Luego de varios minutos de análisis, los uniformados concluyeron que la maleta no representaba ningún riesgo. En su interior solo había ropa deportiva y algunos artículos personales. Una vez descartada la presencia de explosivos, se restableció el tránsito vehicular en el sector.
La tensión se disipó completamente cuando, hacia el mediodía, se presentó en el sitio el dueño de la maleta. Se trataba de un joven que explicó que había olvidado el equipaje al bajarse de su motocicleta frente al establecimiento comercial.
Según su testimonio, se encontraba asistiendo a un velorio cuando, al revisar redes sociales, se enteró de la situación y se desplazó de inmediato al lugar. Al recuperar su pertenencia, ofreció disculpas a las autoridades y a los ciudadanos por el incidente que generó alarma en la comunidad.
Aunque todo resultó ser una falsa alarma, el hecho activó en tiempo récord los protocolos de seguridad y puso a prueba la capacidad de reacción de las autoridades locales. La Policía destacó la eficacia del operativo y agradeció la denuncia oportuna realizada por un ciudadano.
Las autoridades aprovecharon la ocasión para reiterar la importancia de no dejar objetos personales sin supervisión en lugares públicos, ya que pueden generar situaciones innecesarias de pánico y la movilización de recursos especializados.
Igualmente, se invitó a la ciudadanía a continuar alertando a las autoridades ante cualquier elemento sospechoso, recordando que la seguridad colectiva depende del compromiso y colaboración de todos.
Este tipo de casos evidencian la necesidad de seguir fortaleciendo la cultura ciudadana en torno al manejo responsable del espacio público y la prevención del pánico colectivo frente a situaciones que pueden ser evitables.