Más de 600 policías, ley seca y restricción de hinchas visitantes hacen parte del plan de seguridad en Ibagué para el clásico entre Deportes Tolima y Atlético Nacional, este fin de semana en el estadio Manuel Murillo Toro.
Este fin de semana, Ibagué vivirá uno de los encuentros más esperados del fútbol colombiano: el clásico entre Deportes Tolima y Atlético Nacional. Ante la alta expectativa y posibles riesgos de alteración del orden público, las autoridades locales han implementado un riguroso plan de seguridad para garantizar una jornada tranquila y segura.
Más de 600 policías estarán desplegados por toda la ciudad, en especial en las inmediaciones del estadio Manuel Murillo Toro, donde se llevará a cabo el encuentro. La vigilancia iniciará desde tempranas horas del día y se mantendrá durante y después del partido.
Entre las medidas más destacadas está la implementación de ley seca en el perímetro cercano al estadio. Desde el mediodía del viernes 2 de agosto hasta el mediodía del sábado 3, estará prohibido el expendio y consumo de bebidas alcohólicas en el sector comprendido entre las calles 35 y 40, entre carreras 2ª y 4B.
Así mismo, se decretó el cierre de fronteras para las barras visitantes. Esta decisión implica que los seguidores del Atlético Nacional no podrán ingresar a la ciudad para acompañar a su equipo, con el fin de evitar enfrentamientos entre hinchadas.
El Mayor Ricardo Andrés Moreno, comandante del Distrito Uno de Policía METIB, indicó que esta estrategia busca prevenir cualquier alteración del orden. “Invitamos a la comunidad a respetar las medidas, a colaborar con las autoridades y a llegar con anticipación. La seguridad del evento es nuestra prioridad”, expresó.
Por su parte, la Alcaldía de Ibagué también hizo un llamado al buen comportamiento y al juego limpio. Las medidas, según dijeron, buscan proteger la vida, preservar el orden y demostrar que Ibagué está preparada para eventos de alta concurrencia.
La Administración Municipal reiteró que este tipo de encuentros deportivos deben vivirse con alegría, respeto y responsabilidad, y que toda persona que incumpla las disposiciones asumirá las consecuencias legales correspondientes.