El procurador regional del tolima será el encargado de investigar el presunto delito cometido por el mandatario local al hacer uso de un bien público como lo es el estadio de fútbol Manuel Murillo Toro de Ibagué.
Este hecho se conoció el fin de semana por parte de medios locales y por medio de una denuncia pública hecha por el concejal Rubén Darío Correa, quien en la actualidad viene ejerciendo un control político a la administración.
Además, se conoció por parte del concejal Correa, que para ese día 6 de marzo del presente año hubo ingreso de particulares al estadio con todos los elementos de una fiesta privada.
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Incluso, se supo que un contratista de la alcaldía fue quien financió este evento en donde presuntamente estuvo el alcalde y sus familiares haciendo uso indebidamente del estadio.
Otro dato relevante y que asalta a la opinión pública, está en que el gerente del IMDRI Alejandro Ortiz y Hurtado han guardado silencio frente a la pregunta de sí es cierto o no qué hubo una fiesta privada en este escenario.
Finalmente, con esa investigación preliminar el alcalde está bajo la lupa de una posible sanción disciplinaria y posiblemente penal.