El Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado conmemora dos décadas de trabajo en la defensa de los derechos humanos y la construcción de memoria histórica en Colombia.
El Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice) celebró su vigésimo aniversario reafirmando su compromiso con la verdad, la justicia y la memoria de las víctimas del conflicto armado en Colombia. La conmemoración reunió a diversas organizaciones sociales del Tolima en un acto simbólico de resistencia y reivindicación.
Absalón Arias, miembro del capítulo Tolima, destacó el papel fundamental del Movice en el fortalecimiento de los procesos organizativos de familias buscadoras de personas desaparecidas y en la denuncia de los llamados “falsos positivos”. “Movice ha sido clave en el registro y documentación de estos crímenes de Estado, visibilizando una realidad que no puede quedar en el olvido”, afirmó.
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El evento, lejos de una celebración convencional, se centró en la reflexión y el compromiso. En lugar de un pastel, los asistentes encendieron velas y compartieron chicha proveniente de Coyaima, preparada por ancestras guardianas de semillas, como símbolo de resistencia y conexión con la memoria histórica.
Isabel Cristina Pardo, secretaria técnica del Movice en Tolima, expuso las seis estrategias clave con las que la organización impulsa su labor: garantías de no repetición, prevención de violencia basada en género, lucha contra la impunidad, defensa del territorio, herramientas jurídicas para la responsabilidad del Estado y el fortalecimiento de la verdad y la memoria.
El encuentro permitió no solo recordar a las víctimas, sino también plantear objetivos y metas para continuar defendiendo sus derechos. Se discutieron acciones concretas para exigir justicia y acompañar a quienes aún buscan a sus familiares desaparecidos.
En el marco de esta conmemoración, las organizaciones presentes reafirmaron su compromiso con la denuncia de las violaciones de derechos humanos y la construcción de una sociedad basada en la verdad y la reparación.
Movice, a lo largo de estos 20 años, ha demostrado que la memoria no es solo un ejercicio del pasado, sino una herramienta para transformar el presente y evitar que la violencia se repita. Su trabajo sigue siendo una luz de esperanza para quienes claman justicia en Colombia.