Murillo, en el Tolima, presentó la Ruta del Arriero como parte del Encuentro Sudamericano por la Cordillera de los Andes, una iniciativa que honra el legado de los arrieros y su labor en las montañas andinas. La ruta revive un oficio ancestral que aún se mantiene vivo en la memoria de la comunidad.
En el marco del Encuentro Sudamericano por la Cordillera de los Andes, el municipio de Murillo, en el Tolima, se ha convertido en un escenario para recordar y celebrar la tradición del arriero con la presentación de la Ruta del Arriero. Esta experiencia turística destaca la histórica labor de los hombres y mujeres que, desde tiempos ancestrales, recorren las montañas andinas transportando la riqueza agrícola y ganadera de los pueblos.
La Ruta del Arriero es un homenaje vivo a quienes han dedicado su vida a los caminos de la cordillera. Alexander Castro Salcedo, secretario de Cultura y Turismo del Tolima, destacó que la ruta “es la expresión del trabajador de montaña que todos los días se levantaba para ejercer su labor y producir la riqueza de los pueblos de la montaña”. Esta iniciativa forma parte del proyecto Tolima, Corazón de los Andes, que busca promover el turismo cultural y sostenible en la región.
Uno de los principales impulsores de esta ruta es Estefanny Castellano, gestora turística y nieta de uno de los arrieros más representativos de Murillo. Castellano ha dedicado su vida a rescatar el legado de los arrieros y evitar que esta memoria se pierda con el tiempo. “Este oficio está desapareciendo, y mi trabajo ha sido rescatar la memoria histórica de los arrieros, especialmente en Murillo”, expresó Castellano con orgullo.
Estefanny, que creció rodeada de arrieros y el trabajo con mulas, subrayó la importancia de no dejar que esta tradición se apague. “Quiero que esta memoria no se pierda. Crecí entre mulas, bultos de papa, y lo que más deseo es que el legado de los arrieros siga vivo”, comentó emocionada. Además, resaltó la relevancia de la herrería, otro componente vital de la tradición andina, que se expone en la ruta.
Durante el evento, los visitantes podrán participar en actividades como la herrada y abanlonada de las mulas, la cargada de los animales, y ver un stand con obras inspiradas en la herrería, un oficio esencial para el trabajo de los arrieros. También habrá un espacio dedicado al cuidado de los animales, donde se explicará cómo se alimentan y protegen durante las largas travesías por las montañas.
La alcaldesa de Murillo, Camila Sánchez, también anunció una nueva alternativa para el turismo rural: la Ruta de la Leche, que complementará la oferta turística del municipio y brindará a los visitantes una experiencia única centrada en la ganadería y la producción láctea.
Con la Ruta del Arriero y la Ruta de la Leche, Murillo refuerza su posición como un destino cultural y rural de gran relevancia en el Tolima, al mismo tiempo que preserva y promueve las tradiciones que han forjado la identidad de los pueblos andinos. Estas iniciativas se consolidan como una muestra del rico patrimonio de la región y del esfuerzo por mantener vivas las costumbres ancestrales.
Así, Murillo se reafirma como un epicentro de la cultura andina, un lugar donde las tradiciones cobran vida y donde el turismo se convierte en una herramienta poderosa para la preservación cultural y el desarrollo sostenible.











