En una aparición inesperada en el programa “Ping Pong Político” de la emisora “Ecos del Combeima”, el exalcalde Julio Roberto Vargas defendió su controvertida decisión de desistir de la defensa jurídica del municipio de Cajamarca. Esta estrategia, según Vargas, tenía como objetivo permitir la utilización de los impuestos de industria y comercio cobrados al INVIAS para ejecutar proyectos locales.
De acuerdo a declaraciones, el 29 de julio de 2022, Vargas presentó ante el Consejo de Estado un documento de “desistimiento a recurso de apelación”, una medida que solo él y su equipo de asesores conocían, y que no fue compartida al parecer, con la administración entrante. Vargas argumentó que esta herramienta jurídica permitía continuar con el cobro de impuestos al INVIAS, lo que facilitó la financiación de 50 proyectos de gran impacto en el municipio. “Nosotros continuamos con toda esa estrategia jurídica y con ello logramos incorporar unos recursos para ejecutar nuestros 50 proyectos de gran impacto”, afirmó Vargas.
Sin embargo, esta estrategia ha sido fuertemente criticada por haber puesto a Cajamarca en una situación financiera crítica. De haberse apelado y defendido adecuadamente el municipio, posiblemente no enfrentaría la actual crisis que podría llevarlo a acogerse a la ley 550. Durante el programa, Vargas se desconectó abruptamente del debate, citando problemas de conectividad, lo que dejó muchas preguntas sin respuesta.
El alcalde actual, Camilo Valencia, expresó su preocupación y sentido de responsabilidad frente a la situación. “En el gobierno anterior se renunció a la defensa en la segunda instancia. Durante el proceso de empalme nunca se nos notificó sobre eso; en las actas no aparecen procesos relacionados, fue una sorpresa para nosotros”, afirmó Valencia y agregó que “sería muy irresponsable de mi parte alargar y alargar esto y finalmente afectar al municipio; no es para señalar a alguien en específico sino para dar a conocer lo que está sucediendo”, declaró Valencia. En los próximos días, se espera que Valencia se reúna con el Ministerio de Hacienda para determinar el rumbo a seguir y buscar soluciones para la crisis financiera del municipio.
Por su parte el ex mandatario, Julio Roberto, señaló que el actual mandatario Camilo Valencia ha montado, al parecer una cortina de humo, “Valencia no sabe lo que está diciendo y está desinformando a la comunidad de Cajamarca y a la opinión pública, tratando de disfrazar una administración pasiva. Lo que ha hecho es una ‘cortina de humo’ tratando de culpar al anterior gobierno en cabeza mía”, afirmó Vargas.
Sin embargo, el exalcalde criticó la falta de continuidad en la defensa jurídica del municipio por parte de la administración actual. “El alcalde de Cajamarca no le ha prestado atención a esta serie de situaciones y lo que se está evidenciando es que él tenía que armar y seguir haciendo la defensa jurídica al municipio en sus procesos y cobrando impuestos (…) y no lo ha hecho hasta el momento”, denunció Vargas.
Vargas también rechazó las afirmaciones de Valencia de que no se le informó adecuadamente sobre la estrategia jurídica. “El decir que no se le informó es algo muy falso. El alcalde nunca fue en persona a que yo le entregara toda la información del empalme a pesar de que lo pedí públicamente. (…) Él envió un equipo de personas a hacer el empalme y eran personas que no tenían experiencia en este tipo de cosas”, añadió Vargas.
Sin embargo, para el 5 de enero del presente año, el alcalde Camilo Valencia denunció públicamente que había recibido la alcaldía sin empalme y falta de transparencia por parte del exmandatario Julio Roberto, señalando que entre los compromisos económicos heredados, se destacan deudas relacionadas con la nómina y prestadores de servicios, así como proyectos inconclusos como el parque y el coliseo. Incluso dijo Valencia que el exsecretario de Hacienda de la anterior administración, lo responsabilizó de no facilitar la información necesaria y por poner obstáculos en el proceso de transición.
Hay que recordar, que el Tribunal Administrativo del Tolima ha notificado al Municipio de Cajamarca un embargo por cerca de 70 mil millones de pesos debido a presuntas irregularidades en la liquidación y manejo de los impuestos de Industria y Comercio correspondientes a los años 2011, 2012, 2013 y 2014. Aunque la deuda data de periodos anteriores, el conflicto legal se desencadenó en las administraciones a partir de 2016.
Finalmente, al parecer actuaciones irregulares en la liquidación de impuestos llevaron al Instituto Nacional de Vías (INVIAS) a iniciar un proceso legal en 2021. Durante un tiempo, los gobiernos anteriores manejaron los recursos embargados sin restricciones, lo que complicó la situación financiera del municipio. El pasado 11 de julio de 2024, el Tribunal falló a favor del INVIAS, ordenando la devolución inmediata de los recursos, incluyendo intereses moratorios y la aplicación del artículo 838 del Estatuto Tributario, lo que duplica la deuda original.