El presidente Gustavo Petro afirmó que las Entidades Promotoras de Salud (EPS) deben asumir sus compromisos financieros o enfrentarán procesos de liquidación.
El presidente Gustavo Petro confirmó que el Gobierno Nacional no asumirá las deudas acumuladas por las EPS y reiteró que estas entidades deben cumplir con sus obligaciones financieras. El mandatario enfatizó que, pese a los más de 100 billones de pesos girados a las EPS, la crisis en el sistema de salud persiste.
Según cifras presentadas, las deudas de las EPS superan los 15 billones de pesos, sin contar la Nueva EPS. Además, las obligaciones por insumos y medicamentos con las gestoras farmacéuticas ascienden a casi 1 billón de pesos. Petro advirtió que, en caso de que las EPS no cubran estas cuentas, serán liquidadas conforme a la ley.
El presidente también se refirió a la reserva técnica de las EPS, que supera los 10 billones de pesos y no cumple con el régimen de inversión establecido. En ese sentido, afirmó que su Gobierno no está dispuesto a asumir responsabilidades que corresponden a las entidades privadas.
“La crisis del sistema de salud es premeditada y busca tumbarlo”, expresó Petro, señalando a gobiernos anteriores como responsables del desabastecimiento de medicamentos. Insistió en que el Estado ha cumplido con los pagos al sector, pero que son las EPS las que han fallado en la destinación adecuada de los recursos.
El mandatario subrayó que el modelo actual permite que los privados manejen los fondos sin garantizar el acceso a los servicios de salud. “Nosotros no pagamos las deudas de los privados. Los privados deben pagar sus deudas a las clínicas y hospitales o, de lo contrario, se liquidan, como lo establece la norma”, afirmó.
El anuncio de Petro ha generado reacciones en el sector salud, donde algunos expertos advierten sobre el impacto de una eventual liquidación masiva de EPS. Mientras tanto, el Gobierno continúa impulsando su reforma a la salud, en la que busca cambios estructurales en el modelo de financiamiento y prestación del servicio.
Las declaraciones del presidente reavivan el debate sobre el futuro de la salud en Colombia y la responsabilidad de las EPS en el manejo de los recursos. En los próximos días se espera una respuesta del sector privado y nuevas medidas por parte del Gobierno.