La Policía Nacional ha preparado un operativo especial en todo el país para garantizar la seguridad de los niños, niñas y adolescentes durante la celebración del Día Dulce este 31 de octubre. En ciudades como Ibagué, las autoridades han reforzado las medidas de seguridad y han puesto en marcha recomendaciones clave para que esta fecha se celebre sin contratiempos y con un enfoque en la protección de los menores.
Desde la Policía Metib, se invita a los padres a evitar dejar solos a los menores en lugares públicos concurridos, como centros comerciales y parques, ya que la presencia de adultos es fundamental para prevenir situaciones de riesgo. Además, se recomienda que cada niño lleve consigo una tarjeta con información básica, incluyendo el nombre, dirección y teléfono de sus padres, lo cual facilitaría su localización en caso de extravío.
Otra de las recomendaciones de seguridad es evitar que los menores reciban dulces de desconocidos y revisar cuidadosamente que los productos no estén vencidos ni tengan empaques alterados antes de ser consumidos. “Queremos que los niños disfruten de este día de manera segura, por eso es importante tomar estas precauciones”, indicó la Metib.
Además, se recuerda a los padres que mantengan a los menores cerca en todo momento, especialmente en zonas de alto tráfico vehicular. Las autoridades también sugieren evitar que niños mayores se encarguen del cuidado de los más pequeños, pues esto puede generar situaciones peligrosas.
La Policía recomienda el uso de disfraces y accesorios seguros, evitando elementos como espadas, bastones o máscaras que puedan limitar la visibilidad de los niños o representar un riesgo. También se sugiere planificar rutas de recorridos conocidas y seguras, evitando áreas desconocidas.
Finalmente, se invita a la comunidad a utilizar las líneas de emergencia, como la 141 del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y el 123 de la Policía Nacional, para reportar cualquier situación de riesgo. Con este operativo, las autoridades buscan que el Día Dulce sea una celebración segura y sin incidentes, donde la prioridad sea el bienestar y protección de los más pequeños.