En una decisión que busca salvaguardar la integridad y el derecho a la información, varios policías han sido separados de sus cargos tras agredir a periodistas que cubrían el asesinato del director de la cárcel Modelo de Bogotá, Elmer Fernández.
La medida fue confirmada por una fuente oficial, quien aseguró que los uniformados serán investigados por su comportamiento inapropiado. Los periodistas afectados, pertenecientes a diversos medios de comunicación, denunciaron que los policías intentaron sacarlos a empujones del lugar, les taparon los lentes de las cámaras con las manos y los amenazaron con esposarlos si continuaban con su trabajo.
Estas acciones ocurrieron mientras los reporteros intentaban capturar imágenes del lugar del crimen.El incidente se produjo alrededor de las 4:00 p.m., tras el asesinato de Elmer Fernández. El coronel retirado de la Policía, que había asumido la dirección de la cárcel La Modelo el 4 de abril, fue atacado mientras transitaba por la carrera 30 con calle 80, de camino a su residencia.
Un sicario lo ultimó con un disparo certero, en un hecho que ha conmocionado a la comunidad.Días antes de su asesinato, Fernández había denunciado amenazas en su contra debido a su labor en el penal, donde implementaba estrategias anticorrupción y realizaba requisas aleatorias. Estas acciones lo habían convertido en blanco de amenazas, como quedó evidenciado en un panfleto intimidante enviado por los presuntos responsables del crimen.”Para que vea que yo sí tengo poder y si me trasladan le mato la familia.
De parte de Pedro Pluma para el director que si se vuelve a meter de requisa para el patio le mato a la familia”, decía el panfleto recibido por Fernández, evidenciando la seriedad de las amenazas que enfrentaba.El caso ha generado un gran impacto mediático y social, resaltando la necesidad de proteger tanto a los funcionarios que combaten la corrupción como a los periodistas que informan sobre estos sucesos.
La rápida respuesta de las autoridades al separar a los policías agresores de sus cargos busca garantizar que se respeten los derechos de los periodistas y se mantenga la confianza en las instituciones de seguridad.Las investigaciones tanto del asesinato de Fernández como de la agresión a los periodistas están en curso, y las autoridades han prometido una respuesta contundente para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.