El grano colombiano sigue en máximos, impulsado por factores climáticos y de mercado. La carga de 94 kg se pagó a más de 3 millones de pesos en el país.
El precio del café colombiano continúa su ascenso y alcanzó este 4 de febrero un nuevo récord en la Bolsa de Nueva York, cerrando en 3,83 dólares por libra. Esta cifra mantiene al grano en máximos históricos y supera los valores registrados en décadas anteriores, cuando el mercado cafetero alcanzó sus picos más altos en los años 50 y 70.
La Federación Nacional de Cafeteros de Colombia (FNC) informó que el precio interno por carga de 94 kilogramos de café pergamino seco se situó en 3’009.000 pesos, reflejando el impacto positivo de la cotización internacional. Asimismo, el precio de la pasilla contenida en el pergamino se mantuvo en 7.000 pesos por kilo.
El alza en los precios ha sido impulsada por múltiples factores, entre ellos, la incertidumbre climática, la especulación del mercado y la preocupación por las cosechas en Brasil y Vietnam, los dos principales productores de café en el mundo. La sequía en estas regiones ha generado temores sobre una posible reducción de la oferta, lo que ha contribuido a la volatilidad de los precios.
Brasil, que aporta cerca del 40% de la producción mundial, enfrenta desafíos climáticos que han afectado su rendimiento. Vietnam, con una participación del 17% en el mercado global, también ha experimentado dificultades en sus cultivos. Colombia, en tercer lugar con un 7% de la producción mundial, ha visto un impacto favorable en sus exportaciones gracias a este contexto.
En contraste con el incremento en los precios, el consumo de café ha mostrado tendencias divergentes. En mercados maduros como Europa y Estados Unidos, se ha registrado una ligera caída en la demanda, atribuida a factores económicos y cambios en hábitos de consumo. En Estados Unidos, por ejemplo, el auge de tratamientos para la pérdida de peso ha reducido la preferencia por bebidas como los cafés latte.
Por otro lado, China ha emergido como un actor clave en el crecimiento de la demanda de café. En el periodo 2023-2024, el país importó 4,3 millones de sacos, un incremento significativo en comparación con los 1,5 millones de hace cuatro años. Analistas prevén que esta tendencia continuará, consolidando a China como un mercado estratégico para la industria cafetera.
Además de su creciente consumo, China se posiciona en el puesto 13 de los mayores productores de café, con una producción anual de aproximadamente 2 millones de sacos. Su desarrollo en la industria podría impactar el mercado global en los próximos años.
Con los precios en niveles récord y una demanda en constante evolución, la industria cafetera enfrenta un panorama de oportunidades y desafíos. La volatilidad del mercado seguirá siendo un factor clave a monitorear para productores y exportadores.
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