Autoridades y líderes del resguardo San Miguel aclararon que no hubo retención ni hechos violentos contra el alcalde Luis Orlando Ortiz. La manifestación se desarrolló de forma pacífica para exigir cumplimiento de compromisos con la comunidad indígena.
Durante la mañana de este miércoles, rumores difundidos en redes sociales generaron preocupación en el municipio de Coyaima, al señalar que el alcalde Luis Orlando Ortiz habría sido presuntamente retenido por miembros de un cabildo indígena. Sin embargo, horas después, tanto las autoridades locales como los líderes de la comunidad desmintieron completamente esta versión.
De acuerdo con la información oficial, lo ocurrido fue una manifestación pacífica adelantada por integrantes del Resguardo Indígena San Miguel, quienes se congregaron en la zona oriental del municipio para reiterar sus solicitudes sobre proyectos y recursos del Sistema General de Participaciones (SGP). La concentración se desarrolló sin enfrentamientos ni alteraciones del orden público.
El secretario de Gobierno municipal, Jair Triana, explicó que los manifestantes únicamente esperaban al mandatario local para dialogar sobre las inversiones pendientes. “En ningún momento hubo retención ni actos de fuerza. Fue una reunión acordada previamente para buscar soluciones conjuntas y fortalecer el diálogo con la comunidad”, afirmó el funcionario.
Según se conoció, la manifestación reunió a cerca de 700 personas pertenecientes a 169 familias del resguardo, quienes expresaron su preocupación por el retraso en la ejecución de proyectos en materia de salud, educación e infraestructura rural. Los líderes insistieron en mantener una comunicación directa con la administración municipal.
Tras el intercambio de opiniones, se acordó que el alcalde Ortiz visitará personalmente el resguardo este jueves en horas de la tarde, con el fin de revisar los compromisos adquiridos y establecer un cronograma de cumplimiento. La reunión contará con acompañamiento de la Personería y representantes de la Gobernación del Tolima.
Las autoridades locales hicieron un llamado a los ciudadanos y medios de comunicación para verificar la información antes de difundirla, evitando generar alarma en la población. “El orden público en Coyaima está bajo control. La comunidad indígena mantiene una actitud de respeto y diálogo, sin que se haya presentado ningún tipo de retención o agresión”, reiteró Triana.
El Gobierno Departamental destacó la importancia del diálogo intercultural y el respeto por los derechos de las comunidades indígenas, subrayando que la concertación es la vía para resolver las diferencias sin recurrir a la desinformación ni a los rumores infundados.
Con esta aclaración, se descarta oficialmente cualquier situación de crisis en el municipio, y se resalta que la jornada de protesta concluyó en completa calma, reafirmando el compromiso de las autoridades y los pueblos indígenas por mantener una convivencia pacífica y respetuosa en el sur del Tolima.