Los recientes temblores que han ocurrido en diferentes partes del país han generado interrogantes sobre un posible aumento en la frecuencia de los sismos. Sin embargo, el Servicio Geológico Colombiano ha aclarado que no es cierto que estén ocurriendo más sismos que en años anteriores. A través de una gráfica que muestra la actividad sísmica desde 1994 hasta la fecha, la entidad demostró que se mantiene en niveles similares.
La percepción de un incremento en los temblores se debe, en gran medida, al crecimiento de la población y su asentamiento en áreas sísmicamente activas. El Servicio Geológico explicó que es más común sentir un sismo en el centro u occidente del país que en el oriente, no porque tiemble más o menos, sino debido a la distribución de la población y la configuración tectónica del territorio.
Colombia, por su ubicación geográfica en la esquina noroccidental de Sudamérica, donde convergen las placas tectónicas del Caribe, Nazca y Sudamérica, es un país propenso a los sismos. Esto no solo indica que la ocurrencia de estos eventos es frecuente, con aproximadamente 2.500 sismos al mes, la mayoría de ellos imperceptibles para las personas, sino que también puede desencadenar otros fenómenos como tsunamis y movimientos en masa, lo que incrementa los riesgos para la vida y los bienes de miles de personas.
Es importante destacar que el Servicio Geológico Colombiano se encarga de monitorear y estudiar la actividad sísmica en el país. Su labor es fundamental para generar información precisa y confiable sobre los sismos y brindar alertas tempranas en caso de eventos de mayor magnitud. La entidad destaca la importancia de estar preparados y contar con medidas de prevención ante estos fenómenos naturales.
Ante la preocupación ciudadana, es fundamental difundir información basada en datos científicos para evitar la propagación de rumores infundados y mantener a la población informada sobre la realidad de la actividad sísmica en el país. Además, es necesario promover la cultura de prevención y la adopción de medidas de mitigación de riesgos en las zonas sísmicas.