Autoridades de salud intensifican medidas para contener el brote y recomiendan la vacunación inmediata.
El departamento del Tolima enfrenta una situación preocupante tras la confirmación de 37 casos de fiebre amarilla, de los cuales 15 han sido mortales. Las autoridades han advertido que el virus no se limita a una región específica, sino que representa una amenaza para los 47 municipios del departamento.
Katerine Rengifo, secretaria de Salud Departamental, señaló que la fiebre amarilla es una enfermedad infecciosa transmitida por mosquitos en zonas rurales y boscosas, y que la mejor manera de prevenirla es mediante la vacunación. “Este no es solo un problema del suroriente del Tolima, sino de todo el departamento. Es fundamental que la población acuda a vacunarse”, enfatizó.
En respuesta al incremento de contagios, se llevó a cabo el simposio Alerta en el Tolima por fiebre amarilla: estrategias de manejo urgente para salvar vidas, con la participación del Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Salud, la Superintendencia de Salud y otros organismos. Durante el evento, se analizaron medidas para mitigar la propagación del virus y fortalecer la vigilancia epidemiológica.
Los síntomas de la fiebre amarilla incluyen fiebre alta, dolor de cabeza, pérdida de apetito, escalofríos y dolores musculares. En los casos graves, los pacientes pueden presentar coloración amarillenta en la piel y ojos, orina oscura, vómitos con sangre y dolor abdominal severo. Ante estos síntomas, las autoridades recomiendan acudir inmediatamente al centro de salud más cercano.
Para reducir el riesgo de contagio, se han emitido una serie de recomendaciones clave: vacunarse contra la fiebre amarilla, eliminar criaderos de mosquitos en hogares y espacios públicos, usar ropa que cubra el cuerpo y aplicar repelente si se va a viajar a zonas endémicas.
Los turistas que planean visitar áreas de riesgo deben vacunarse al menos 10 días antes del viaje. “Hacemos un llamado a todos los tolimenses para entender que la solución está a nuestro alcance, es gratuita y es la vacuna contra la fiebre amarilla”, concluyó la funcionaria.
Las autoridades sanitarias continúan monitoreando la evolución del brote y fortaleciendo estrategias de prevención para evitar que la enfermedad cobre más vidas en la región.