Tres contagios confirmados en visitantes no vacunados hicieron que las autoridades regionales reactivaran la alerta por fiebre amarilla en el Tolima. La Secretaría de Salud exhorta a residentes y turistas a actualizar su esquema de vacunación, sobre todo quienes planean viajar a municipios con alto riesgo epidemiológico.
La Secretaría de Salud del Tolima confirmó recientemente tres nuevos casos de fiebre amarilla en personas que ingresaron al departamento sin contar con la vacuna, lo que reactivó la alerta sanitaria en la región. Tras unos meses de aparente estabilidad, el regreso de la enfermedad evidencia que el riesgo continúa latente, especialmente ante la movilidad de viajeros desde otras zonas del país. La alerta genera preocupación entre autoridades y comunidades por igual.
La secretaria de Salud del Tolima, Katherine Rengifo, advirtió que aunque el departamento mantiene una cobertura importante de vacunación, estos nuevos contagios muestran que la enfermedad sigue circulando. Señaló que la falta de inmunización, sumada al ingreso de viajeros, puede favorecer brotes, por lo que instó a nunca bajar la guardia frente a la prevención. “La protección es colectiva y depende de cada persona”, enfatizó.
Las autoridades hicieron un llamado urgente a los residentes y turistas que planean movilizarse hacia zonas con riesgo epidemiológico a completar su esquema de vacunación. Los municipios priorizados por su exposición son Villarrica, Cunday, Purificación, Prado, Chaparral, Río Blanco y Ataco, entre otros. Las campañas de inmunización se mantienen activas y la vacuna sigue siendo gratuita y segura.
Rengifo recordó que la vacuna contra la fiebre amarilla brinda una protección confiable con una sola dosis, lo que la convierte en la medida más efectiva para prevenir la enfermedad. Además, recomendó protegerse contra picaduras de mosquitos con repelente, ropa adecuada y uso de toldillos, sobre todo en zonas rurales o boscosas donde circula el vector.
El resurgimiento del brote ha obligado a las autoridades departamentales a reforzar la vigilancia epidemiológica y aumentar los controles sanitarios. Equipos de salud pública se desplegarán en municipios vulnerables para intensificar la vacunación, monitorear casos sospechosos y distribuir información preventiva entre la comunidad.
En lo que va del periodo de alerta, el Tolima concentra el mayor número de casos y muertes por fiebre amarilla en el país, lo que ha motivado a las autoridades nacionales a tomar medidas de emergencia sanitaria. Esta situación subraya la urgencia de mantener la cobertura de vacunación alta y de no relajar las medidas de prevención en zonas de riesgo.
La comunidad, por su parte, reaccionó con preocupación ante la noticia. Residentes de municipios priorizados pidieron a las autoridades garantizar un acceso amplio y eficiente a la vacuna, así como campañas de educación sobre las medidas de autocuidado. Muchos señalaron que la sensibilización y el acceso a los centros de vacunación serán claves para evitar nuevos contagios.
Finalmente, la Secretaría de Salud instó a quienes hayan viajado recientemente desde zonas con brotes de fiebre amarilla a vigilar síntomas como fiebre, dolores musculares, ictericia o malestar general, y a acudir de inmediato a los servicios de salud si presentan señales compatibles con la enfermedad. Las autoridades recalcaron que la pronta detección y notificación son esenciales para contener la propagación del virus y proteger a la población del Tolima.





