Durante la audiencia en el Juzgado 44 Penal de Bogotá, la Fiscalía proyectó por error un video pornográfico, generando confusión y sorpresa en la sala. El incidente ocurrió mientras se presentaban pruebas clave sobre el presunto soborno y fraude procesal en el caso contra el expresidente.
Un hecho inusual marcó la decimoprimera audiencia del juicio contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez en el Juzgado 44 Penal de Bogotá. En plena presentación de pruebas por parte de la Fiscalía, se proyectó accidentalmente un video pornográfico, generando desconcierto entre los asistentes.
El error ocurrió cuando el ente investigador mostraba archivos relacionados con el abogado Juan José Salazar, socio de Diego Cadena, pieza clave en el proceso. En medio de la exposición de chats y documentos, el material inapropiado apareció en pantalla, interrumpiendo momentáneamente la diligencia.
La fiscal Marlenne Orjuela reaccionó de inmediato, pidiendo a su equipo que identificara “los archivos con contenido serio”. A pesar de las risas y el asombro en la sala, la jueza Sandra Liliana Heredia permitió que la audiencia continuara tras la disculpa del ente investigador.
El proceso contra Uribe Vélez avanza con la presentación de pruebas sobre presuntos pagos a testigos para cambiar sus declaraciones. En la audiencia, se exhibieron documentos y registros de visitas de Diego Cadena a la cárcel La Picota, donde se habrían realizado reuniones con el exparamilitar Juan Guillermo Monsalve.
Entre los elementos clave, la Fiscalía también presentó una copia de la agenda de alias Víctor, donde figuran giros monetarios que podrían probar la compra de testimonios. Estas pruebas refuerzan la tesis del ente acusador sobre la presunta manipulación de testigos en favor del expresidente.
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El juicio contra Uribe Vélez ha estado marcado por momentos de tensión y controversia. Su defensa sostiene que se trata de un montaje judicial, mientras que la Fiscalía insiste en la existencia de pruebas sólidas que lo vinculan con los delitos de soborno y fraude procesal.
El insólito incidente del video porno, aunque anecdótico, no desvía la atención sobre la gravedad del caso. La diligencia continúa con la declaración de la investigadora del CTI, Luz Mireya López, quien expone las pruebas que sustentan la acusación.
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