La gobernadora del Tolima, en un consejo de seguridad convocado de urgencia, exigió a las autoridades militares y de policía actuar de manera decidida ante la creciente amenaza que representan los ataques con drones en varios municipios del departamento, especialmente en Ataco y Anzoátegui. Estos incidentes, que han sembrado el pánico entre los habitantes de la región, fueron atribuidos a grupos armados ilegales, específicamente disidencias de las Farc, cuya presencia ha ido en aumento en el sur del Tolima.
Durante la reunión, que contó con la presencia de altos mandos de la Policía Nacional, el Ejército, representantes del Ministerio Público y los alcaldes de las localidades afectadas, se discutieron las acciones a seguir para contrarrestar esta nueva modalidad de ataque que ha desafiado las capacidades de respuesta de las fuerzas de seguridad.
La gobernadora expresó su frustración por la falta de respuesta efectiva por parte de la Fuerza Pública, a pesar de las inversiones realizadas por su administración en materia de seguridad. “Llevamos meses advirtiendo sobre el deterioro de la situación en estas zonas. Sin embargo, siento que no hemos recibido el respaldo necesario para proteger a nuestra gente”, afirmó con preocupación.
Uno de los aspectos más alarmantes de estos ataques es la dificultad para identificar el origen de los drones. Según la mandataria, los artefactos voladores, que se han utilizado para lanzar explosivos, operan desde alturas que hacen casi imposible su detección por parte de la comunidad o las fuerzas de seguridad locales. “Entre cada lanzamiento transcurren aproximadamente 15 minutos, tiempo suficiente para que los atacantes se oculten sin dejar rastro”, explicó.
Además de los ataques con drones, la gobernadora hizo un llamado a prestar atención al avance de las disidencias de las Farc en el departamento, señalando que su expansión en el sur del Tolima es una amenaza directa a la estabilidad y seguridad de la región. “La cercanía con departamentos donde la situación de orden público es crítica nos obliga a redoblar esfuerzos”, añadió.
En respuesta, las autoridades presentes acordaron intensificar las operaciones de vigilancia y reforzar la presencia militar en las zonas más vulnerables. Asimismo, se discutió la posibilidad de incorporar tecnologías avanzadas para la detección y neutralización de drones, un desafío que hasta ahora no había sido enfrentado en el departamento. Por último, la gobernadora reiteró su compromiso con la seguridad del Tolima, asegurando que no escatimará esfuerzos para garantizar la protección de los ciudadanos, pero subrayó la necesidad de una acción coordinada y más decidida por parte de la Fuerza Pública. “Es fundamental que trabajemos juntos para devolver la tranquilidad a nuestros municipios”, concluyó.