En un operativo conjunto en Solano, Caquetá, Ejército, Fuerza Aérea y Policía neutralizaron a 12 miembros del grupo armado Estructura Primera, entre ellos alias “Paisa”, cabecilla clave y hombre de confianza de Iván Mordisco.
Un contundente golpe asestaron las Fuerzas Militares al grupo armado residual Estructura Primera “Armando Ríos” en el sur del país. En una operación ofensiva desarrollada en zona rural del municipio de Solano, Caquetá, fueron neutralizados 12 integrantes de esta disidencia de las FARC, en lo que constituye una de las acciones más significativas del año en la lucha contra los grupos armados ilegales.
El operativo, ejecutado de manera coordinada entre el Ejército Nacional, la Fuerza Aérea Colombiana y la Policía Nacional, dejó como resultado siete disidentes muertos en combate, cuatro capturados y una persona que se entregó de manera voluntaria. La acción militar estuvo precedida por labores de inteligencia y vigilancia en esta estratégica región del suroriente colombiano.
Entre los neutralizados figura alias “Paisa”, considerado uno de los principales cabecillas de la estructura y hombre de confianza de Iván Mordisco, máximo líder de las disidencias. Según las autoridades, “Paisa” llevaba más de ocho años delinquiendo y era señalado como responsable de por lo menos 20 ataques terroristas en los departamentos de Guaviare, Meta, Vichada, Guainía y Vaupés.
Durante la operación fueron incautadas diez armas entre largas y cortas, más de 30 granadas de diferentes calibres, abundante munición, detonadores y equipos de comunicación de alta tecnología. También se encontraron prendas de uso exclusivo de la Fuerza Pública, lo cual evidencia la capacidad de infiltración y logística de esta estructura criminal.
El Ministerio de Defensa calificó el resultado como un golpe estratégico, no solo por la baja de uno de los líderes más buscados, sino por la afectación directa a las finanzas y capacidad operativa del grupo armado residual. Alias “Paisa” era además el encargado de coordinar rutas del narcotráfico y reclutamiento forzado en la región.
Las autoridades destacaron que esta ofensiva se dio sin afectar a la población civil, reafirmando el compromiso del Gobierno Nacional con la legalidad, la seguridad territorial y la protección de los derechos humanos en las zonas históricamente golpeadas por el conflicto.
El Ejército anunció que continuará desplegando operaciones militares en los departamentos del suroriente colombiano para desmantelar completamente las estructuras armadas ilegales que persisten en atentar contra la paz del país.
Con este resultado, las Fuerzas Armadas fortalecen su presencia en el Caquetá y demuestran avances en la estrategia de seguridad integral. La comunidad de Solano ha expresado su respaldo a la operación, con la esperanza de recuperar la tranquilidad en una región que ha sido escenario de violencia durante décadas.