El ente de control evidenció falta de alimento, higiene deficiente y escasez de personal en la atención de los animales.
La Personería de Ibagué realizó una inspección sorpresa en el recién inaugurado Centro de Atención y Protección Animal (CAPA) y encontró a cerca de 170 perros y gatos en condiciones deplorables. Falta de alimento, espacios insalubres con acumulación de heces y orines, así como escasez de personal, fueron algunas de las deficiencias detectadas en el lugar.
El CAPA, inaugurado el pasado 30 de diciembre por la alcaldesa Johana Aranda con una inversión de $2.050 millones, había sido presentado como un referente nacional en bienestar animal. “Este Mega CAPA es un espacio que cambiará la vida de cientos de peluditos y que demuestra que en Ibagué los animales sí importan”, aseguró la mandataria en su discurso de apertura.
Sin embargo, las denuncias realizadas por la Personería contradicen la imagen que quiso proyectar la Administración Municipal. A través de un comunicado, el ente de control exigió acciones inmediatas para garantizar el bienestar de los animales alojados en el centro. “La situación es crítica. No hay suficiente alimento, las condiciones de higiene son precarias y hay muy poco personal para atender a los animales. Se requieren medidas urgentes”, señala el informe.
Las irregularidades en el CAPA también salpican a la empresa encargada del suministro de alimento, Servicios Empresariales SKY S.A.S., vinculada a la familia del concejal César Franco. Su representante legal, Ernesto Alfonso Quiroga Uribe, esposo de Karina Aguilera Franco, prima del cabildante, ha sido señalado como uno de los principales beneficiarios de contratos durante la actual administración.
Este nuevo escándalo se suma a denuncias previas sobre presuntas irregularidades en la gestión de los recursos destinados al bienestar animal en Ibagué. Recientemente, se reveló que la comida destinada a los animales del CAPA habría sido utilizada para eventos sociales, lo que generó indignación entre activistas y ciudadanos.
Desde distintos sectores, organizaciones defensoras de los animales han pedido a la Alcaldía respuestas claras y soluciones concretas. Exigen no solo mejorar las condiciones del CAPA, sino también garantizar que los recursos destinados al bienestar animal sean utilizados de manera transparente.
Por su parte, la Alcaldía de Ibagué aún no ha emitido un pronunciamiento oficial frente a los hallazgos de la Personería. Mientras tanto, el estado de los animales y el futuro del CAPA siguen en el centro del debate público.