El gobernador del Tolima como primera autoridad en el departamento NO ha decidido sí se hacen o no una serie de proyectos que generan gran impacto en el departamento y ponen en riesgo el derecho colectivo a un ambiente sano. Las comunidades del departamento del Tolima, en especial de los municipios afectados por estos dos proyectos extractivistas, manifiestan inconformidad y molestia, porque no han recibido una postura y una manifestación clara por parte de sus gobernantes.¿Cómo es posible que en el departamento esté adjudicado un proyecto de fracking y uno de minería de oro subterránea? ¿Cómo es posible que los gobernantes sepan de estos proyectos y no se manifiesten al respecto? Nacen estas y muchas otras preguntas que quizás nos lleven a encontrar posibles respuestas.
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Este problema no viene de ahora y no es nuevo, recordemos que en el 2017 llegó a Cajamarca-Tolima una de las multinacionales más grandes e importantes del mundo en asuntos mineros, la Anglogold Ashanti (AGA) y junto con el impulso y el aval del ex presidente de la republica Álvaro Uribe Vélez y ex Gobernador del Tolima Oscar Barreto Quiroga, tenían expectativas amplias con la implementación de este proyecto. Afortunadamente la unión y el trabajo en colectivo de la ciudadanía sirvió y se convocó a una consulta popular donde se logró tumbar el proyecto minero. En conclusión: Así como se venció a la política de la muerte y de la destrucción en Cajamarca, en los demás municipios del Tolima se espera que pase lo mismo. El silencio por parte de los gobernantes se vuelve cómplice.
Somos muy conscientes de que los gobiernos locales están a favor de este tipo de modelos de “desarrollo”, pero nosotros como ciudadanía no nos quedamos atrás. Siempre recordamos que EL PUEBLO ES SUPERIOR A SUS DIRIGENTES.