La vicepresidenta se unió a la movilización en la capital del Valle, donde fortaleció su activismo ambiental. Mientras tanto, en Bogotá, sindicalistas y estudiantes respaldan la reforma laboral en la Plaza de Bolívar.
La vicepresidenta Francia Márquez reapareció públicamente al sumarse a la movilización en Cali, ciudad donde consolidó su liderazgo en la lucha ambiental y social. La funcionaria recorrió la Calle Quinta junto a cientos de manifestantes en respaldo a las reformas del Gobierno Nacional.
“En la capital de resistencia, en la calle, junto al pueblo, defendiendo sus derechos”, expresó Márquez a través de sus redes sociales, en un mensaje que reafirma su compromiso con las causas sociales. Su participación se da tras su salida del Ministerio de Igualdad y su renuncia al Proceso de Comunidades Negras (PCN).
Durante la jornada de protestas en Cali, se registraron incidentes aislados, como la quema de llantas en la Autopista Suroriental con Carrera 26, aunque las autoridades lograron despejar la vía rápidamente. Otras manifestaciones en la ciudad estuvieron marcadas por protestas de usuarios de EPS.
En Bogotá, la movilización se concentró en la Plaza de Bolívar, donde sindicalistas y estudiantes del Sena expresaron su rechazo al archivo de la reforma laboral, mientras la Comisión Séptima del Senado debatía su futuro a pocos metros del lugar.
Martha Alfonso, integrante del Comité Ejecutivo de Fecode, también participó en la marcha y advirtió sobre el rumbo político del país. “Colombia no puede seguir el camino de Argentina y elegir un gobierno de derecha como el de Javier Milei”, declaró.
Desde la Universidad Nacional, cerca de dos mil indígenas llegaron a la movilización en la capital, sumándose al llamado del Gobierno para apoyar sus reformas sociales. La presencia de estas comunidades refuerza la visión de las marchas como un espacio de expresión para diversos sectores del país.
La Plaza de Bolívar se convirtió en el epicentro de la manifestación, con la presencia de trabajadores, estudiantes y líderes sociales que piden mayor protección a los derechos laborales y el avance de la reforma. La jornada transcurrió en su mayoría de forma pacífica, aunque con una fuerte presencia de la fuerza pública.
Las movilizaciones a nivel nacional evidencian la polarización en torno a las reformas impulsadas por el Gobierno. Mientras el Congreso define su futuro, sectores sociales continúan en las calles manifestando su respaldo a los cambios propuestos en materia laboral y de equidad.