Municipios como Ibagué, Melgar, Honda y Mariquita lideran la afluencia de visitantes, mientras autoridades locales promueven un turismo sostenible y de calidad para fortalecer la economía regional.
Con gran expectativa por la temporada de Semana Santa, el departamento del Tolima proyecta una ocupación hotelera superior al 85 %, según datos suministrados por las autoridades regionales. Se prevén picos de hasta el 95 % en destinos clave como Ibagué, Melgar, Honda y Mariquita, reconocidos por su riqueza cultural, histórica y natural.
Municipios como Prado y Carmen de Apicalá también reportan alta afluencia de visitantes, consolidándose como destinos preferidos para quienes buscan descanso, tradición y naturaleza en esta época del año. El clima cálido, los paisajes y la oferta religiosa y recreativa son parte del atractivo.
Ante el incremento del turismo, las autoridades hacen un llamado a comerciantes, hoteleros y prestadores de servicios para brindar una atención cálida, amable y profesional, con el fin de garantizar experiencias satisfactorias y fomentar el retorno de los visitantes.
“La calidad en la atención al cliente es un factor clave para promover el turismo sostenible, fortalecer la economía local y convertir cada visita en un recuerdo memorable”, afirmó Yolanda Nasayo Bravo, secretaria de Desarrollo Económico del Tolima, quien lidera las acciones de promoción territorial.
Con este enfoque, la administración departamental impulsa buenas prácticas de atención al turista, como la amabilidad auténtica, la escucha activa y la empatía, elementos que, según las autoridades, deben ser parte esencial del servicio en todos los rincones del Tolima.
Otras recomendaciones incluyen mantener una buena actitud, actuar con vocación de servicio, cuidar cada detalle en la atención y promover el consumo de productos y servicios locales, lo cual aporta a la economía regional y resalta lo mejor del territorio.
Además de promover destinos ya consolidados, la estrategia turística busca dar visibilidad a municipios emergentes con potencial en ecoturismo, gastronomía, turismo religioso y experiencias comunitarias, fortaleciendo así una visión integral del desarrollo turístico.
Con estos esfuerzos, el Tolima no solo espera atraer más turistas en esta temporada, sino también convertirlos en promotores naturales del departamento, invitando a otros a conocer una región que apuesta por experiencias auténticas, sostenibles y memorables.