El diputado Carlos Reyes y el concejal Javier Mora se declararon en independencia dentro del Partido Liberal en el Tolima y confirmaron que no apoyarán la candidatura de Olga Beatriz González a la Cámara de Representantes. La decisión, comunicada a Mauricio Jaramillo, profundiza la división dentro de la colectividad.
El Partido Liberal en el Tolima enfrenta una nueva fractura política tras la decisión del diputado Carlos Reyes y el concejal de Ibagué, Javier Mora, de declararse en independencia dentro de la colectividad. La ruptura se hizo evidente luego de una reunión entre la representante a la Cámara, Olga Beatriz González, y el jefe del liberalismo en el departamento, Mauricio Jaramillo, en la que ambos líderes fueron excluidos.
El distanciamiento de Reyes y Mora marca un punto de quiebre dentro del partido, pues su postura representa un desafío a la actual dirigencia. Reyes, quien no ocultó su molestia por la falta de convocatoria a la reunión clave, enfatizó: “¿Por qué me invitaron?”, dejando en evidencia el malestar y las profundas diferencias con la representante González.
Ante este panorama, el asambleísta confirmó que su equipo político tomará decisiones autónomas de cara a las elecciones legislativas. Mora, por su parte, también ratificó su distanciamiento y aseguró que el camino que están tomando responde a la falta de consenso dentro de la colectividad.
Mauricio Jaramillo, líder del liberalismo en el Tolima, no ha intervenido para evitar la ruptura. Según Reyes, el exsenador comprende la existencia de diferentes corrientes dentro del partido y ha optado por no ejercer presión para retenerlos dentro de su estructura política.
El impacto de esta fractura podría sentirse en las elecciones a la Cámara de Representantes, pues Reyes no descarta la posibilidad de presentar un candidato propio en representación de los sectores liberales inconformes. “Cada día tiene su afán. En su momento tomaremos nuestra decisión”, afirmó, sin cerrar la puerta a una eventual candidatura alternativa.
La crisis dentro del liberalismo en el Tolima refleja un desgaste en las relaciones internas del partido y plantea interrogantes sobre su cohesión de cara a los próximos comicios. La posibilidad de un reacomodo político o una ruptura definitiva dependerá de las estrategias que adopten los diferentes sectores en las próximas semanas.
Con la incertidumbre reinante, el Partido Liberal enfrenta el desafío de recomponer su unidad y evitar que las divisiones internas afecten su desempeño electoral en el departamento. La evolución de esta crisis será determinante para definir el futuro de la colectividad en la región.